Cartografías del cotidiano (2021-) es un proyecto de investigación, mediación y creación en territorios y ciudades, donde la emigración de mujeres en condición de vulnerabilidad es un hecho que atraviesa el espacio íntimo de la vida cotidiana. Nuestra propuesta es abordar las realidades de mujeres que trabajan en el sector del hogar y los cuidados, muchas de ellas migrantes, provenientes de países y regiones completamente distintas a aquellas en las que residen, mayormente ubicadas en el territorio europeo.
La fragilidad legal en la que mayoritariamente viven estas mujeres marca de forma profunda su realidad cotidiana y el entorno laboral en el que se mueven. En muchas ocasiones deben enfrentar no solo la renuncia a su formación y ámbito profesional de origen, sino tratos cuestionables por parte de sus empleadores, y cargas laborales extremas. Sin embargo, sus voces, problemáticas y realidades aún permanecen en una zona poco escuchada, por lo que trabajar con esos testimonios y experiencias de vida desde la práctica artística resulta imprescindible, no solo para abrir una reflexión en primera persona sobre su cotidianidad, sino también para generar un espacio de resiliencia y fortaleza ante las circunstancias sociales que padecen.
Tratándose de un fenómeno que afecta a muchos países de Europa Occidental, este proyecto puede recorrer estas experiencias en diferentes ciudades, siempre trasladando la metodología e ideas fundamentales al contexto en el cual decida realizarse. En este caso, la ciudad donde se desarrollará es Barcelona, una de las que registra más alto índice de trabajo de empleadas migrantes en el sector de los cuidados ( comúnmente conocidas como “internas”), y también una de las que cuenta con mayor número de asociaciones de corte social que trabajan sobre esta problemática.
El proyecto se activa siempre desde la relación con un espacio o institución creativa que funciona como nodo de contacto con un barrio y una ciudad, y a su vez como espacio “escénico”, de “presentación” de un conflicto hasta ahora no lo suficientemente visibilizado desde el arte, para ponerlo a disposición de otros públicos y oyentes, y para problematizarlo, también, desde el punto de vista formal bajo la pregunta: ¿cómo un dispositivo artístico (un espacio de representación y creación estética) puede contener y hablar sobre un fenómeno de fuerte calado social? Será un proyecto creado colectivamente entre las coordinadoras (artistas cubanas también migrantes), facilitadoras y creadoras invitadas, y las mujeres protagonistas de sus propias historias de vida, alrededor de las cuales se compondrán los dispositivos de relación que cruzarán sus relatos y experiencias de vida, sus vivencias vinculadas a la migración, sus deseos y batallas personales en función de alcanzar una vida más digna y plena de derechos.
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